Las partituras legadas por el compositor alemán Johann Sebastian Bach conducen hoy los acordes de músicos de todo el mundo, para rendir homenaje al prolífico instrumentista en el 336 aniversario de su nacimiento.
El también director de orquesta creó más de mil composiciones vocales e instrumentales, entre las cuales destacan títulos como El clave bien temperado, Penitente y arrepentido, Ciaconna, Quiero entregaros todo mi corazón, Suites para chelo, Conciertos de Brandemburgo 1721, Toccata y Fuga en Re menor, entre varios.
Reconocido como el gran representante musical de la época barroca, cada año es recordado por cientos de personas, que le rinden tributo en pergrinaciones por los sitios donde vivió hasta su lecho mortuorio, en la iglesia de Santo Tomás, ubicado en la ciudad de Leipzig.
Como parte de la iniciativa surgida hace una década en Nueva York, Estados Unidos: Bach in the subways, tuvo lugar en España un concierto protagonizado por 22 violoncelistas del Gran Teatre del Liceu de Barcelona, Orquesta Sinfónica de Barcelona y Nacional de Cataluña, quienes hicieron suya la exigente técnica que demanda su obra.
Pionero en el arte de establecer las conexiones entre la matemática y la composición musical, Bach constituye uno de los referentes académicos e históricos hasta la actualidad, por su aporte a la concepción de las sonoridades dándole protagonismo a los instrumentos.
Asimismo, el museo dedicado al intérprete y profesor en la que fuera su casa en la ciudad de Eisenach ofrece un programa de actividades que acercan el legado del autor al público, desde su biblioteca, partituras y colección de instrumentos de la época del compositor.
