Realizamos una entrevista a Rubén Ibáñez, un joven deportista madrileño que venció a los puntos este sábado 27 de febrero al gallego Adam Macareno en la velada de Muay Thai y Kickboxing “MFC Championship” en Ponferrada.
Rubén, con 21 años, amateur de K1, con un recorrido de 8 peleas, procedente del gimnasio Voodoo Fight Gym en Leganés, Madrid, sorprendía al público ganando en la categoría de -63kg al veterano Adam Macareno, del gimnasio Iago Barros, A Coruña, con 22 peleas a sus espaldas.
Otros peleadores que han salido de la escuela Voodoo, tanto femeninos como masculinos son: Silviu Hitman Vitez, Roberto Alario, Marco Patiño, Marcos San Paulino, Alba Porrón y Luisa Burgos .
P: Para que nuestros lectores puedan conocerte mejor ¿Cómo definirías tu estilo de kickboxing?
R: Mi estilo de kickboxing, si te digo la verdad, lo definiría como muy eléctrico. Mi punto fuerte es la movilidad y combino muy bien lo que son los puñetazos y las patadas.
P: ¿Cómo ha sido la preparación de la pelea? ¿Has llevado una dieta muy estricta?
R: Mi preparación para la pelea ha sido como cualquier otra preparación que haya hecho, súper dura. Tienes que pasar un mínimo de dos horas por el gimnasio y sumarle después tu trabajo de carrera, cada día el que te toque, nosotros lo dividimos en carrera continua, cuestas y esprines. En cuanto a la dieta, sí que hay que controlarse mucho la alimentación, porque es uno de los pilares fundamentales si quieres ser un buen deportista y alguien en este deporte. Personalmente nunca he pagado un nutricionista, pero mi madre siempre me ha hecho las comidas muy bien.
Como anécdota, cuando empecé a pelear no controlaba muy bien este aspecto de la preparación y sufría mucho para dar el peso. Decidí tomármelo más en serio, hablé con mi madre y desde entonces las comidas, y sobre todo las cenas, las llevo muy bien.
P: ¿Qué esperabas encontrar en la pelea?
R: Según lo que habíamos visto mi entrenador y yo, David Durán “Hammer”, es un rival con mucha más experiencia que nosotros y que le gusta mucho la guerra, le gusta mucho tirar hacia delante. Lo que teníamos que hacer nosotros era trabajar un poquito la movilidad y hacer nuestro trabajo, nada más.
P: ¿Cómo te has sentido al subir al ring y durante la pelea? Has sorprendido a mucha gente que no te conocía, ¿darás pronto el salto a profesional?
R: Me he sentido muy nervioso ya que llevo un año inactivo, parado, y eso se nota a la hora de subirte al ring, y a la vez con muchas ganas. La verdad es que cuando suena la campana ya te olvidas de todo y solo piensas en hacer tu trabajo y bajarte lo antes posible del ring. Y con respecto a si daré el salto a profesional, eso lo tendremos que decidir mi entrenador y yo. Pero vamos, por mi parte yo estoy preparado para lo que sea.
P: Te hemos visto empezar muy duro el encuentro, ¿cuál era tu estrategia de pelea, si se puede saber?
R: Mi estrategia en la pelea, pues lo que te he comentado un poco antes, trabajar la movilidad, que es mi punto fuerte, moverme mucho, trabajar las fintas, los engaños e intentar aprovechar los momentos. Hacer fallar al rival y una vez le hago fallar, combinar bien y seguir moviéndome, pegar y que no te peguen básicamente, moverte mucho y cuando él te quiere pegar hacer un desplazamiento lateral o diagonal y que no te encuentre, que yo creo que lo hicimos a la perfección la verdad.
P: ¿Cuánto tiempo llevas practicando este deporte y qué es lo más importante que te ha aportado?
R: Llevo practicando este deporte alrededor de cuatro años y medio, y me ha aportado muchísimas cosas, mucha estabilidad en mi vida a nivel emocional, a nivel mental, mucha disciplina, que era algo que a mi me faltaba hasta que empecé a practicarlo. Empecé en este deporte y me ha cambiado la vida totalmente, a mejor. Le debo mucho.
P: ¿Cual es tu gimnasio? ¿Qué relación tienes con tu entrenador? ¿Y con tus compañeros?
R: Mi gimnasio se llama Voodoo Fight Gym, se encuentra en Leganés, y la relación que tengo tanto con mi entrenador como con mis compañeros, es como si fuera una familia la verdad, estamos todos muy unidos y nadamos todos en el mismo sentido. Nos ayudamos todos mútuamente. Si uno un día está más flojo, pues, todos hemos tenido días malos, nos tenemos que ayudar. Hay muchos competidores y entre todos nos tenemos que apoyar. Somos realmente como una familia.
¿Cómo es tu vida personal fuera del deporte, estudias o trabajas?
R: Actualmente estoy trabajando en un gimnasio, en Fightland, concretamente Fightland Bernabéu, que es una franquicia, una cadena de gimnasios. Acabé el bachillerato, hice la selectividad y no sabía que hacer, si te digo la verdad. Al final pensé que gustándome el deporte podía hacer un grado superior y empecé en TAFAD, lo acabé y ahora estoy trabajando en un gimnasio.
P: Hay muchos que ven a las nuevas generaciones dormidas y apáticas, una juventud que se refugia en las redes sociales y la droga, dejando de lado la vida sana y el deporte. ¿Cómo lo ves tú y qué les dirías?
R: Hombre, obviamente, lo veo mal y les diría que tienen dos opciones: el camino malo y el camino bueno, el camino de las drogas o el camino del deporte. Y desde mi punto de vista creo que el camino del deporte les va a aportar y a enseñar unos valores mucho más positivos que si van a un parque a fumarse unos porros. Creo que les va a aportar muchas más cosas si llevan una buena alimentación si hacen deporte, no hace falta que sean deportistas de élite ni profesionales, simplemente por salud.
P: ¿Dónde te ves en un futuro?
R: Pues, en lo más alto posible la verdad, yo voy a llegar hasta donde pueda, lo más alto que yo pueda llegar es donde voy a llegar. Yo lo voy a dar todo para llegar a lo más alto. Campeón del mundo.
