La empresa estadounidense de comercio electrónico y servicios de computación en nube, cuyo propietario Jeff Bezos es el segundo hombre más rico del mundo. Amazon con una capitalización bursátil de más de 1 700 mil millones de dólares (Similar al PIB de Rusia, el 12º país más rico del mundo). Registró el año pasado un aumento neto de ventas a escala global del 22% (469.800 millones de dólares), con unos ingresos superiores a 33 mil millones dólares. Sin embargo, en Europa no paga impuestos. Esto no es en todos los países, sino en su filial y financieramente a la que le corresponde la mayor parte del impuesto. Donde no solo no está pagando, sino que además se está beneficiando con hasta 1 000 millones € de créditos fiscales.
Amazon acumula las ganancias obtenidas en la unión europea para después repatriarlas a Estados Unidos. Mientras, acumula pérdidas generadas en filiales no pertenecientes a la UE para crear créditos fiscales con los que descuenta los impuestos que pagó en un país extranjero por alguna operación de comercio internacional, aunque este no sea con Europa. Este método es descrito en el estudio hecho por La Izquierda en el Parlamento Europeo: The Amazon method: How to take advantage of the international state system to avoid paying tax Study.
Debido a este tipo de estrategias Amazon ha generado mayores beneficios libres de impuestos que la cantidad total de impuestos que ha tributado durante los últimos 10 años. La empresa sigue aludiendo que esto se debe a las inversiones hecha en el continente, según el portavoz de la compañía ‘‘El año pasado la filial europea Amazon tuvo pérdidas, ya que abrimos más de 50 nuevos centros y creamos más de 65 000 puestos de trabajo bien remunerados, con lo que nuestra plantilla permanente en Europa supera los 200 000 trabajadores” De los cuales algunos son obligados a orinar en botellas por la falta de tiempo o a dormir en almacenes. Y si 65 mil son bien remunerados 135 000 puestos no. El mismo portavoz también habla de que hay países en Europa donde Amazon paga cifras millonarias. Pero si analizas lo que pagan es una mísera parte de lo que ganan; En el caso de España, donde ingresaron 5 400 € millones y pagaron 261 millones € (menos del 5%).
No es la primera vez que Amazon tiene problemas con los impuestos. En 2006 trasladaron la mayoría de sus beneficios a una filial sin empleados, cuando debían haberse registrado en otra filial luxemburguesa con personal real (mínimo 500) y actividades reales que están sujetas a la tasa impositiva corporativa del 29% de ese país. La Comisión Europea también les demandó por haber recibido 250 millones € en ventajas fiscales ilegales en Luxemburgo. Europa perdió el juicio, pero hubo otro de una empresa del mimo sector, que con juicios muy similares, se le reclamó 120 millones € por ‘‘tax ruling’’; acuerdos entre empresas e instituciones que les permite a la primeras elegir ‘‘impuestos a la carta’’ a través de pactos. Aunque el caso de Amazon quedase anulado, se habla de la posibilidad de que la multinacional haya presionado para influir en el resultado judicial.

Manifestación para que Amazon pague sus impuestos.
Por último, Margrethe Vestager la Comisaria europea de Competencia aún mantiene que “Luxemburgo otorgó beneficios fiscales ilegales a Amazon. Como resultado, casi tres cuartas partes de las ganancias de Amazon no fueron gravadas. En otras palabras, Amazon pudo pagar cuatro veces menos impuestos que otras empresas sujetas a las mismas normas fiscales nacionales. Esto es ilegal según las normas sobre ayudas estatales de la UE. Los Estados miembros no pueden otorgar beneficios fiscales selectivos a grupos multinacionales que no están disponibles para otros”.