Como ya pudimos conocer en un artículo anterior, la trayectoria de Sri Lanka siempre ha ido de la mano de numerosas polémicas y de la desestabilización. Durante este mes de julio, fiel a su historia, ha seguido esa estela que le caracteriza y se han producido diversos asaltos y manifestaciones en todo el país a raíz de la fuerte crisis económica que atraviesa desde hace años, debido a una escasez de divisas extranjeras, que les ha impedido seguir realizando importaciones.
Los ciudadanos, hartos de la situación, han estado organizando manifestaciones por todo el país y asaltando edificios públicos. Ya han dado la vuelta al mundo las imágenes del asalto a la residencia del presidente, pero también han entrado al despacho del primer ministro.
Soulèvement en cours au #SriLanka. Les manifestants viennent de prendre le contrôle du secrétariat présidentiel. Le Président est en fuite alors que sa résidence a elle aussi été envahie #GoHomeGota #July9th #SriLankaProtests pic.twitter.com/dO7HOGFzjd
— Anonyme Citoyen (@AnonymeCitoyen) July 9, 2022
Se ha declarado el toque de queda en todo el país y el estado de emergencia. Además, desde lo que queda del gobierno srilankés se ha ordenado desalojar los edificios ocupados por los manifestantes. Estos han anunciado que los abandonarán de forma voluntaria pero continuarán la lucha en las calles a través de manifestaciones. Las cuales son duramente reprimidas por el ejército y la policía.
Hablando con estos manifestantes, estos detallan que el actual déficit de divisas extranjeras para realizar importaciones se debe a una mala gestión del presidente Rajapaksa, ahora fugado. Los hospitales ingresan centenares de heridos diariamente debido a las protestas que se están dando por todo el país y a la dura represión del ejército y policía. Sin embargo, varios manifestantes entrevistados han declarado no tener miedo ya que ‘es mayor el sentimiento de rabia y el hambre’.
Esta situación contrasta con la actitud del presidente del país, Gotabaya Rajapaksa, que habiendo dimitido y huido del país, se aloja en un lujoso hotel de Singapur. Rajapaksa sigue a la espera de trasladarse a Emiratos Árabes Unidos y tras pasar por Maldivas, donde fue abucheado por los propios pasajeros del avión en el que huyó y fue recibido por una manifestación que pedía su expulsión. Con esto, Sri Lanka está en búsqueda de formar un nuevo gobierno y se sospecha que el presidente se exilió antes de dimitir para evitar ser arrestado y juzgado.
Esta dimisión es la primera de un presidente desde que se instauró el régimen parlamentario en 1978 y hace entrever la difícil situación que atraviesa el país. La cual deberá ser afrontada por el ejecutivo que salga en unas próximas negociaciones entre partidos o una nuevas elecciones.

Fuente: AFP