La cumbre de la OTAN celebrada en Madrid el pasado mes, nos ha dejado un sinfín de titulares. Entre ellos podemos encontrar los relacionados con la guerra de Ucrania y los gastos que esta está generando en los diferentes países miembros. Entre los gastos que se debatieron, estaba la subida del gasto en defensa al famosos 2% del PIB, que ya imploraba Donald Trump a Europa años atrás. Ese 2%, según el presidente Pedro Sánchez, se prevé alcanzar para el año 2029.
Relacionado con el gasto en defensa, el gobierno español ha ido aumentando su presupuesto , llegando a cubrir el 1.01% del PIB. Tras la cumbre en Madrid, España prometió nuevos envíos a Ucrania junto con una mayor presencia del ejercito español en las fronteras con Rusia, situadas en países miembros de la OTAN. Este nuevo despliegue de medios se tradujo, en un nuevo crédito extraordinario, cifrado en unos 1.000 millones de euros.
Este gasto ha venido con una muy tímida crítica por una parte del gobierno. Esta, dice no refrendar los compromisos de España con la OTAN, aunque a la hora de la verdad siguen manteniendo sus puestos. Se sigue manteniendo así, las supuestas guerras internas entre PSOE y Unidas Podemos. Sin embargo, en asuntos tan importantes como estos, la parte morada sigue el sentido de la corriente marcada por el PSOE .
Por otro lado España se encuentra a las puertas de una gran crisis económica, por lo que este tipo de gastos extraordinarios, se ven impopulares por parte de la población. No obstante, la medida cuantitativa y cualitativa de movilización está siendo muy baja para lo que venían acostumbrando épocas como estas en nuestro país. La enorme propaganda dada por los medios hegemónicos en cuanto a las sanciones a Rusia tienen mucho que ver en esto. Además de que quienes más capacidad tienen para confrontar con este gobierno, son sus más leales “súbditos”.

Cola de personas esperando su turno en una oficina de empleo en Madrid. EFE/Juanjo Martín
Actualmente, la inflación se encuentra disparada, sobre todo en productos como carburantes, electricidad o comida. Provocando así, un enorme aumento del coste de vida, que lleva consigo a cada vez más familias situadas en el umbral de la pobreza. A día de hoy, el coste de vida promedio ronda los 1.505€ mensuales por persona y asciende a 3.067€ en familias promedio de cuatro personas. Teniendo en cuenta que el SMI está estipulado en 1000€ mensuales, la lógica apremiaría a fomentar que las familias tuvieran capacidad de salir adelante. Pero, quizás sea demasiado pedir para los que llevan meses creyendo que lo que hacen es algo parecido a jugar el Risk.
El precio de la gasolina vuelve a batir su récord hoy, por segunda semana consecutiva.
Los bolsillos de los trabajadores siguen sufriendo la subida del IPC para que las grandes empresas puedan seguir aumentando sus beneficios sin ningún control. pic.twitter.com/C7s5YRpFJA
— Frente Obrero España (@frenteobreroesp) February 11, 2022