Hoy, en la ciudad gallega, los trabajadores se reunieron para boicotear el pregón que iniciará las fiestas de la Peregrina. En plena ola de conflictividad y con el futuro de los trabajadores pendiendo de un hilo, Miguel Anxo Lores, alcalde de Pontevedra, asistió a un evento que iniciará noventa días de fiesta, enfocada al turismo, mientras apoya el cierre de la fábrica de ENCE. Como consecuencia del cierre, cientos de trabajadores perderán su trabajo directamente y otros miles de forma indirecta.
Gente de "izquierdas" pidiendo el encarcelamiento de trabajadores que se manifiestan libremente.
Personas que se erigen en defensores de la clase obrera jactándose de despidos masivos en Ence.
Y mientras tanto, el frente obrero apoyando a los obreros en la calle.#encenosecierra— Toni (@ToniPVK) August 7, 2021
Cientos de trabajadores sus familiares y el Frente Obrero en Galicia se concentraron en la Alameda de Pontevedra al grito de “Fuera, Fuera” hacia el alcalde y “ENCE si, paro no”, por lo que el pregón no logro realizarse. Poco antes de que acabase el pregón, las vallas que separaban la concentración del acto, fueron derribadas y los trabajadores avanzaron hasta el mismo.
Al acabar el acto, la policía, tanto los antidisturbios como la secreta trataron de escoltar a Lores fuera del acto. En ese momento la conflictividad aumentó y se radicalizó la situación. Los trabajadores de la celulosa rodearon a Miguel Anxo Fernandez Lores, increpándolo por su desastrosa gestión y obligándolo a resguardarse en un bar cercano. En el transcurso de esta situación la policía empujó y agredió a algunos manifestantes para formar una lineal policial al rededor del bar. Al final de la concentración, un grupo de decenas de funcionarios y simpatizantes del bloque recriminaron a los trabajadores su actitud al grito de “fuera ENCE de nuestra ría”.