El incendio ha afectado a la mitad de las personas que allí viven. Aunque no hay daños personales, alrededor de 400 personas se han quedado sin sus pocas pertenencias, incluidos papeles y pruebas para demostrar que llevan aquí tres años y poder pedir el permiso de residencia.
Los incendios en estos asentamientos son habituales ya que los materiales utilizados para su construcción son muy inflamables, como el cartón o el plástico. A ello se suma las precarias condiciones para cocinar o calentarse. El ayuntamiento por su parte sólo les ha proporcionado comida y ropa, sin plantearse habilitar ningún lugar donde puedan dormir ni buscar una solución para poner fin a los asentamientos.
El alcalde, Carmelo Romero Hernández, del Partido Popular Andaluz, que ocupa el cargo desde las elecciones municipales de 1995, ha realizado varias declaraciones en las que asegura: “la mayoría no tienen documentación y que por eso va a ser muy difícil que los contraten para la campaña de la fresa”.
El Alcalde ha proseguido afirmando que “siempre suelen producirse de manera fortuita mientras se están haciendo la comida o son causados por rencillas entre los que viven ahí”, descartando que haya sido provocado de manera intencionada por alguien ajeno al poblado. El incendio se produce justo cuando la temporeros han terminado la recogida de la fresa y se tienen que marchar.
No son contenedores ardiendo, es esta mañana en Palos de la Frontera, Huelva, otro asentamiento de migrantes al que intencionadamente le han prendido fuego el "KKK".
Este fuego sí es violencia, pero este no importa a muchos políticos hipócritas y grandes medios de comunicación. pic.twitter.com/2Tri7PEcGx— Óscar Reina Gómez (@OscarReina23) February 19, 2021
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