Para muchos, por lo menos para la gente de a pie, los apellidos Usó Ferrera no deben sonar a nada, sin embargo, esta familia valenciana, muy a pesar de su bajo perfil, figura entre las diez más ricas de la comunidad y ocupa el puesto 107 entre las familias más ricas de España.
Los bienes de la familia
Los lectores se preguntarán a qué viene todo esto. Seguro no les sonará la dirección Número 18 de la Calle del Pintor Sorolla, en pleno centro financiero de Valencia, un local otrora ocupado por entidades financieras como Unicaja donde hoy tiene sitio la llamada Esperanza Obrera, una iniciativa que sirve a cientos de familias trabajadoras, repartiendo alimentos y dando cobijo a mujeres víctimas de la violencia doméstica, y a quienes no tienen un lugar donde pasar la noche.
En pleno centro de Valencia, @esperanzaobrera ha repartido 2000 juguetes a familias trabajadoras que ni siquiera pueden permitirse un regalo para sus hijos, mientras Ribó y Mónica Oltra viven a gasto pagado y les dan la espalda. https://t.co/sHpn4nHfvF pic.twitter.com/h7dqKJpCZ1
— Frente Obrero España (@frenteobreroesp) January 5, 2021
¿Qué tienen que ver la familia de marras con la iniciativa obrera? Pues al local lo reclaman las Usó Ferrera debido a que en papel les pertenece. Esto bajo Usó Ferrera Valores SL, una sociedad creada, como dice su acta de fundación, para “la adquisición y venta de títulos valores de renta fija y/o variable de cualquier clase, estén o no aceptados a cotización en las bolsas de comercio oficialmente autorizadas, excluyéndose expresamente las reservadas a instituciones de inversión colectiva”, y que consta con un capital social de 59 millones 620 mil 521 euros.
El Rastro del Dinero
Lester Freamon, personaje de la serie norteamericana The Wire, decía que para entender cómo funciona el poder hay que seguir el rastro del dinero. Y siguiendo esta línea, basta una breve investigación en el registro de sociedades para dar con más recursos de la familia.
Primero hay que saber que Usó Ferrera Valores SL está compuesta por las “Tres Marías”, María José, María Dolores y María Teresa Usó Ferrera. Siguiendo individualmente a las hermanas en su aventuras por el intrincado mundo de las sociedades limitadas, nos encontramos con otras tales como Manzana Building SL, dedicada a la misma actividad que la primera que mencionamos y con un capital social que asciende 11 millones 626 mil euros.
Uno sigue explorando y se topa en los registros con otras como Quad Inversiones SL, con un capital social de 1 millón 705 mil euros; Megabizo SL con 640 mil 704 euros o la Usó Ferrera SL con 1 millón 612 mil euros en su haber.
Hay más, pero el entramado es muy grande y haría de esta humilde nota, un libro contable intragable. Por lo tanto vamos a limitarnos a la más importante de todas. Esta es la Uso Ferrera Inversiones SL, y aunque su capital social es de apenas unos 17 mil 999 euros con 82 centésimos, está metida en lo que quizás es uno de los negocios más jugosos de la familia.
Una Coca-Cola, por favor
Sigamos siguiendo, valga la redundancia, el consejo del entrañable Freamon para darnos cuenta de que la Uso Ferrera Inversiones SL forma parte, en calida de “Consejero” de la Olive Partners S.A, una sociedad cuya acta de constitución dice que fue creada para “la compraventa, fabricación, embotellado, envasado, distribucion y comercializacion, tanto nacional como internacional, de toda clase de bebidas y productos de alimentación” y cuyo capital ronda los mil millones y medio de euros.
¿Y qué es esta Sociedad? Pues en términos simples agrupa a los accionistas españoles de la European Partners de Coca Cola, que aglutina las embotelladoras de la marca en Europa, luego de su fusión con Iberian Partners (las ocho concesionarias del negocio de Coca-Cola repartidas por la Península Ibérica).

Las Usó Ferrera tienen un 5% de las acciones de Coca Cola en Europa.
En esta sociedad, según reporta periódico El Confidencial, las hermanas poseen un 5% de las acciones, unos 450 millones de euros.
Esa misma Coca-Cola European Partners que ha emitido un expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 360 trabajadores en España.
La Esperanza Obrera
En contraste con todos estos millones de euros de los que hemos hablado, están las filas de personas haciendo cola en la Esperanza Obrera durante las reparticiones de alimentos, así como las personas sin techo o mujeres víctimas de violencia doméstica que encuentran refugio en esta iniciativa.

Reparto de alimentos en de la Esperanza Obrera.
Un sitio que según reza un comunicado pidiendo apoyo “también ha abierto un espacio de organización y lucha política donde ya participan organizaciones obreras y sindicatos para desarrollar su actividad: asesorías laborales, reuniones de secciones sindicales, visibilizar la resistencia del pueblo saharaui y reivindicar la necesidad de una república popular y federal en España”.
Ese mismo manifiesto denuncia la persecución de la familia contra la iniciativa, quienes han encausado a los responsables del proyecto, sin que las autoridades locales, supuestamente progresistas, como la concejala de Servicios Sociales Isabel Lozano, de Compromís, muevan un dedo por defender a Esperanza Obrera.
Sólo una muestra de la incompatibilidad de los intereses de clases, pero también deja en evidencia a quienes, por más máscaras y adjetivos que se coloquen, son los que trabajan para defender los intereses de los más poderosos.